De regreso a la feminidad bíblica
07/05/2024¿Gorditos pero enamorados?
07/05/2024Para que otras personas vengan a los pies de Cristo, debemos hablar de su amor no sólo con la boca, sino también con nuestro testimonio. La belleza de una persona no sólo está en el exterior, como muchas veces la gente cree, sino también está en el interior como un tesoro escondido aguardando ser descubierto.
- Confía en Dios: La confianza en Dios demuestra nuestra fe y dependencia de Él. Debemos consultar con Él antes de tomar cualquier decisión y obedecerle, estando seguras de que sus planes son mejores que los nuestros. Proverbios 3:5-6
- Obedece la Palabra de Dios: Antes de reaccionar de cierta manera, piensa en lo que Jesús hubiera hecho en tu lugar. ¿Qué dice la Palabra al respecto? ¿Qué nos enseñó con su ejemplo? Medita en esto y decide hacer lo correcto. Santiago 1:22, Proverbios 3:1-4
- Haz el bien: Todo lo bueno viene de Dios, así que debemos honrarlo cumpliendo con lo que Él nos mandó. La Palabra dice que todo lo que hagamos lo tenemos que hacer con amor, como si fuera para Dios, y también advierte en Santiago 4:17 que si sabemos hacer lo que es bueno y no lo hacemos, es pecado. Por eso, siempre debemos elegir hacer el bien. Juan 2:17-18
- Sujétate a tu marido: La sujeción demuestra que no estás tratando de tomar el control, sino que existe una autoridad debajo de la cual te encuentras. La mejor forma de demostrar que una mujer está sujeta a Cristo, es sujetándose a su esposo. Colosenses 3:18
- Vive fiel a tu marido: El verdadero amor lo soporta todo y es para siempre. Así como Cristo es con su Iglesia, fiel y paciente, así deben ser las mujeres con sus maridos. 1 Corintios 13
- Que tu vida y conversación sean un ejemplo de pureza y respeto: Tu vida tiene que ser un reflejo exacto de Cristo. Él personificaba todo lo que era puro, todo lo santo, y así debemos vivir nosotras también. Tu boca habla de lo que tenés adentro tuyo. No pueden brotar dos aguas distintas de una misma fuente; si vos tenés a Cristo en tu corazón, tanto tus actos como tus palabras deben hablar de Él. Tito 2:7-8
- No dejes que los adornos externos se conviertan en una prioridad en tu vida: Nada embellece más a una mujer que las buenas obras que ésta profesa, un espíritu apacible y un corazón lleno de amor hacia Dios, su marido y su familia. Está bien arreglarse y mantenerse en forma, ero cuando eso ocupa el primer lugar en nuestra vida, o cuando nos roba tiempo que deberíamos de invertir en cosas más importantes, está mal. Haz que la mujer interior esté más adornada que la mujer exterior. Lo que va dentro perdura para siempre.
Cuando te mires al espejo, no sólo dediques tiempo en mejorar tu apariencia exterior, recuerda también mejorar tu interior para reflejar a Jesús y acercar a la gente a su Creador. 2 Corintios 3:18
Por la Pra. Bethany Abreu